Hola, ciberanalistas conspiranoicos:
Me pidieron que participara en el blog de Godmakers. Que hiciera cosas de comics pero que no hablara de la peli de Watchmen. Sugerí hacer 12 artículos, más o menos uno por mes, basados en 12 décadas de la historieta (llámale comic, manga, tebeo, BD o cómo le digas en tu país).
No me resulta difícil no hablar de la película de Watchmen... porque yo quisiera hablar de la película del Capitán Marvel, es decir, Mar-Vell, el guerrero y espía kree llegado al planeta Tierra del Universo Marvel.
No os asustéis: que yo sepa no hay película preparada. Lo que voy a dar es mi versión sobre por qué hacer una película de este personaje.
Comienzo por el principio: hoy mismo pongo una cadena de radio cualquiera, hablando sobre la película de Lobezno. Tampoco voy a hablar de esta película que no he visto. ¿Qué me gustaría que dijeran cuando hablan de una película basada en un comic? Pues que se refirieran a la fuente. Apenas lo hacen. Para los comentaristas de la película, y suele pasar en radio, prensa o tele y no sólo en ese programa de radio, hablar de una peli sobre comics significa decir que hay demasiados efectos especiales, hacer alguna concesión a si es o no aburrida, y a la música. En este caso, puntuada bajo, entre 3 y 4, como es habitual, sobre una escala de 10, pese a todo, una comentarista decía que "no era aburrida, que no me dormí", y que era consistente con las otras películas. Casi que se sorprenden sobre la idea de que exista una cierta pretensión de hacer "franquicias" sobre personajes sueltos de los X-Men, es decir, que no hacen ninguna referencia a que eso es lo habitual en los tebeos de superhéroes. Y, que alguien me corrija, dicen que Lobezno en solitario sería un comic de hacia el año 2000, "sorprendentemente contemporáneo" (para que se le haga una película). En resumen, una incomprensión completa de lo que significa un personaje del género de los superhéroes, del medio de comunicación llamado Historieta, eso por parte de los periodistas... una incomprensión pareja a la que sufren los superhéroes por parte del tinglado que hace películas de superhéroes, mediante las cuales desvirtúan y simplifican historias que estarían muy bien. Así como hubo películas del Oeste que eran de aventuras pero que también ponían en evidencia problemas o cuestiones interesantes para la sociedad de Estados Unidos (y, en realidad, de otros sitios del mundo), con los tebeos en general, y de superhéroes, en concreto, también ha sucedido. Hay varios ejemplos. El cine actual, la crítica, y seguramente el público, desprecia cualquier otro mensaje que no sean tortas y tiros.
Simplificar el mensaje... es algo que se suele hacer. Incluso intentan forzar historias de chico encuentra a chica, con un par de dobleces en el guión... Una historia algo torpe... Y dónde he leído yo que algo era así. ¡En la Biblioteca Marvel del Capitán Marvel! Hacia el año 2002, Ediciones Forum (PlanetadeAgostini, Grupo Planeta, es decir, Todo) aún publicaba superhéroes de Marvel, y llegaron a sacar unos tomos recopilatorios llamados Biblioteca Marvel: Capitán Marvel.
Aunque en otras colecciones los artículos suelen hablar de las excelencias de la serie, del personaje, guionistas, dibujantes a lápiz y entintadores... no es el caso de los textos anexos al Capitan Marvel. Se suele decir que las aventuras, el dibujo y el guión son mediocres, que el personaje no encuentra su lugar. Hacia la decena de números, le cambian los poderes. Enseguida, se los vuelven a cambiar, así como el traje. Se supone que las historias son mejores. Estamos entre los números 1 y 3 de la Biblioteca Marvel. Entre los numeros iniciales, hasta el 20, de la colección Captain Marvel. No sé cómo continúa. Igual mejora.
Mi opinión es que no sólo no son mejores ni los dibujos ni el guión del número 16 o 17 en adelante, cuando Roy Thomas, Gil Kane y Syd Shores o Dan Atkins se hacen cargo del personaje, sino que son netamente más aburridos. Sólo se sale ganando en picados y contrapicados, osea, en ver a los personajes desde arriba y desde abajo
En los primeros números, aunque las historias podrían estar mejor contadas o mejor dibujadas, lo cierto es que tenemos un montón de acontecimientos muy interesantes: dos o tres razas alienígenas luchando en La Tierra, una base militar terrestre, la aparición de relevancia en el futuro de Carol Danvers, aparece la Inteligencia Suprema, un tal Zot megapoderoso, y unas cuantas amenazas cósmicas. Me lo pasé bien leyéndolo. Arnold Drake y Gary Friedrich son los dos guionistas que le dan salsa a algo que el pomposo Roy Thomas había hecho comenzar de manera que iba de lo soso a lo aburrido, y cuya pomposidad aburrida retomará números después. Esto puede ser polémico en la medida que llevo leyendo toda la vida que Roy Thomas es de lo mejor que hay en el mundo de los guiones. Por otro lado, el dibujante Gil Kane lo que hace es trabajar lo mínimo. Se dedica a copiar sus dibujos de Green Lantern y poco más, porque es que hasta el guión sale de Green Lantern: la Zona Negativa es un remedo, vacío, eso sí, del Universo de Antimateria de Qward. El enemigo Yon-Rogg pasa de ser rubio ario a ser moreno con una pinta sospechosamente similar a la de Sinestro, el malo de Green Lantern.
Pero vamos a por qué esta primera parte del Capitán Marvel serviría para una película.
Para empezar porque se puede simplificar. Porque los personaje acaban de comenzar. Porque el final es realmente una especie de final. Luego al personaje le cambian los poderes y el traje, y el entorno, se une a Rick Jones... es un superhéroe distinto del original.
Tenemos un doble triángulo amoroso. Entre Mar-Vell, Una y el Coronel Yon-Rogg, por un lado, y con Una, Mar-Vell y Carol Danvers, por otro. Esto es algo que al cine le gusta mucho.
La resolución del triángulo es asimismo muy interesante.
Aunque es una historia del género cósmico, lo cierto es que mantiene, en varios números, amenazas terrestres en una base militar. Osea, que el decorado es fácil y relativamente barato. No nos engañemos por las cifras del cine: intentan siempre gastar poco. Por eso sospecho que los trajes suelen ser negros y no de colorines, por más que nos hayan dicho que es para camuflarse en la noche o porque sería ridículo que fueran de lycra multicolor. Los superhéroes molan porque van en technicolor: porque no necesitan camuflarse para enfrentarse al mal.
Tiene el toque de "soy un enviado de los malos que quieren destruir la Tierra y el sistema de vida yanki pero en realidad yo soy bondadoso y voy a hacer el bien". Es algo que a las películas les gusta.
Aparecen personajes de esos que suelen aparecer en las películas y que no aclaran nada, que sirven como aglutinación de enseres visuales: Ronin el Acusador, La Inteligencia Suprema, Zot... que parece que van de mucha cosa pero cuyo contenido es mínimo.
Se le pueden poner un par de enfrentamientos contra elementos raros: Quasimodo, por ejemplo.
O se puede optar por el misterio del laboratorio del Doctor Lawson, identidad humana en la que se convierte Mar-Vell. Eso es bastante actual: se trata de esos misteriosos misterios misteriosos que pueblan las series de culto de la tele estadounidense actual. Mar-Vell ha tomado el aspecto físico de Lawson, "una invasión de ultacuerpos" o algo así, y siempre hay algún personaje como el del motel (que podría ser uno de esos cómicos que tendrían que hacer gracia) que vería indicios. de si Lawson es Mar-Vell o no. Por otro lado, está la cuestión de si el Doctor Lawson, humano, científico de prestigio y de confianza para los militares terrestres, es/era realmente de los buenos o si en realidad tenía una agenda oculta, mientras que Mar-Vell, extraterrestre kree, espía en una base militar terrestre, es realmente de los malos. Un pequeño rompecabezas que sirva de chicle para el cerebro.
Tiene unas cuantas escenas de tiros, un par de intentos de asesinato, otro de ejecución militar... Y, junto a ellos, tiene alguna frase como la del Capitán Marvel, número 11, cuando él dispara no importa contra qué (en las películas actuales no hay manera de enterarse qué pasa en una batalla). Se trata de una parrafada en la que se interroga sobre la violencia a la par que la intenta justificar: "¡Para unirme a otros seres en la construcción de un Universo mejor, antes debo sobrevivir! ¿O es éste el razonamiento que han empleado todos los luchadores desde el inicio de los tiempos para esconder la sangre de sus propios ojos?" [una gran frase en una de las páginas peor dibujadas de las Historia, por Dick Ayers). Así, pues, acaba con una frase poniendo en cuestión esa violencia, lo que me lleva al siguiente punto.
Esa frase es tremendamente actual, siendo de 1969. Es una frase post-Bush (no, tras los arbustos, sino tras el presidente imperial de los Estados Unidos). Es una frase aplicable a lo que parece que quiere ser, y no sabemos si será, la Era de Obama: no todo se puede resolver con violencia, y tiene que haber otros sistemas.
En ese momento, sucede el hecho luctuoso que marca la nueva vida del Capitán Marvel, y que acaba con un triángulo amoroso a la brava. Es decir, que es una especie de corolario de que la violencia sólo engendra violencia y tal.
Lo que sirve para que el Capitán Marvel, en un hecho que ya vimos desgraciadamente en la película Spiderman I, se dedique a la venganza contra Yonn-Rogg. Esto es algo que, com he dicho ya se usó en películas basadas en superhéroes, pero que aquí tiene su justificición en la historieta. Por otro lado, forma parte de un amplio consenso en los guiones: la venganza por la muerte de un ser querido.
Luego hay un par de escenas de esas de irse al espacio, a un asteroide a hacer cosas como poner tumbas y decir frases. Como en Watchm... ay, no, que no puedo hablar de esto.
En resumen, cortando y recortando (para que quepa en unas dos horas o menos), añadiendo pocos elementos, casi utilizando el mismo guión, y sin necesidad de forzar la historia ni unos personajes que apenas van con caretas que les tapen la cara, tenemos un tebeo considerado mediocre que se podría convertir en una película no mediocre sobre superhéroes. De hecho, es en si mismo una película a la altura de cualquier película de las realizadas hasta hoy en día. El presupuesto puede ser inmenso o mínimo, se pueden usar muchos o pocos efectos especiales, se puede escoger un supervillano o varios, o quedarse sólo con Yon-Rogg, porque todo eso y más cabe en estos 17-20 números iniciales del Capitán Marvel.
Lo malo, lo peor es, como dijeron de forma condescendiente en aquel programa de radio sobre cine: "es de aventuras, el género..."
Me pidieron que participara en el blog de Godmakers. Que hiciera cosas de comics pero que no hablara de la peli de Watchmen. Sugerí hacer 12 artículos, más o menos uno por mes, basados en 12 décadas de la historieta (llámale comic, manga, tebeo, BD o cómo le digas en tu país).
No me resulta difícil no hablar de la película de Watchmen... porque yo quisiera hablar de la película del Capitán Marvel, es decir, Mar-Vell, el guerrero y espía kree llegado al planeta Tierra del Universo Marvel.
No os asustéis: que yo sepa no hay película preparada. Lo que voy a dar es mi versión sobre por qué hacer una película de este personaje.
Comienzo por el principio: hoy mismo pongo una cadena de radio cualquiera, hablando sobre la película de Lobezno. Tampoco voy a hablar de esta película que no he visto. ¿Qué me gustaría que dijeran cuando hablan de una película basada en un comic? Pues que se refirieran a la fuente. Apenas lo hacen. Para los comentaristas de la película, y suele pasar en radio, prensa o tele y no sólo en ese programa de radio, hablar de una peli sobre comics significa decir que hay demasiados efectos especiales, hacer alguna concesión a si es o no aburrida, y a la música. En este caso, puntuada bajo, entre 3 y 4, como es habitual, sobre una escala de 10, pese a todo, una comentarista decía que "no era aburrida, que no me dormí", y que era consistente con las otras películas. Casi que se sorprenden sobre la idea de que exista una cierta pretensión de hacer "franquicias" sobre personajes sueltos de los X-Men, es decir, que no hacen ninguna referencia a que eso es lo habitual en los tebeos de superhéroes. Y, que alguien me corrija, dicen que Lobezno en solitario sería un comic de hacia el año 2000, "sorprendentemente contemporáneo" (para que se le haga una película). En resumen, una incomprensión completa de lo que significa un personaje del género de los superhéroes, del medio de comunicación llamado Historieta, eso por parte de los periodistas... una incomprensión pareja a la que sufren los superhéroes por parte del tinglado que hace películas de superhéroes, mediante las cuales desvirtúan y simplifican historias que estarían muy bien. Así como hubo películas del Oeste que eran de aventuras pero que también ponían en evidencia problemas o cuestiones interesantes para la sociedad de Estados Unidos (y, en realidad, de otros sitios del mundo), con los tebeos en general, y de superhéroes, en concreto, también ha sucedido. Hay varios ejemplos. El cine actual, la crítica, y seguramente el público, desprecia cualquier otro mensaje que no sean tortas y tiros.
Simplificar el mensaje... es algo que se suele hacer. Incluso intentan forzar historias de chico encuentra a chica, con un par de dobleces en el guión... Una historia algo torpe... Y dónde he leído yo que algo era así. ¡En la Biblioteca Marvel del Capitán Marvel! Hacia el año 2002, Ediciones Forum (PlanetadeAgostini, Grupo Planeta, es decir, Todo) aún publicaba superhéroes de Marvel, y llegaron a sacar unos tomos recopilatorios llamados Biblioteca Marvel: Capitán Marvel.
Aunque en otras colecciones los artículos suelen hablar de las excelencias de la serie, del personaje, guionistas, dibujantes a lápiz y entintadores... no es el caso de los textos anexos al Capitan Marvel. Se suele decir que las aventuras, el dibujo y el guión son mediocres, que el personaje no encuentra su lugar. Hacia la decena de números, le cambian los poderes. Enseguida, se los vuelven a cambiar, así como el traje. Se supone que las historias son mejores. Estamos entre los números 1 y 3 de la Biblioteca Marvel. Entre los numeros iniciales, hasta el 20, de la colección Captain Marvel. No sé cómo continúa. Igual mejora.
Mi opinión es que no sólo no son mejores ni los dibujos ni el guión del número 16 o 17 en adelante, cuando Roy Thomas, Gil Kane y Syd Shores o Dan Atkins se hacen cargo del personaje, sino que son netamente más aburridos. Sólo se sale ganando en picados y contrapicados, osea, en ver a los personajes desde arriba y desde abajo
En los primeros números, aunque las historias podrían estar mejor contadas o mejor dibujadas, lo cierto es que tenemos un montón de acontecimientos muy interesantes: dos o tres razas alienígenas luchando en La Tierra, una base militar terrestre, la aparición de relevancia en el futuro de Carol Danvers, aparece la Inteligencia Suprema, un tal Zot megapoderoso, y unas cuantas amenazas cósmicas. Me lo pasé bien leyéndolo. Arnold Drake y Gary Friedrich son los dos guionistas que le dan salsa a algo que el pomposo Roy Thomas había hecho comenzar de manera que iba de lo soso a lo aburrido, y cuya pomposidad aburrida retomará números después. Esto puede ser polémico en la medida que llevo leyendo toda la vida que Roy Thomas es de lo mejor que hay en el mundo de los guiones. Por otro lado, el dibujante Gil Kane lo que hace es trabajar lo mínimo. Se dedica a copiar sus dibujos de Green Lantern y poco más, porque es que hasta el guión sale de Green Lantern: la Zona Negativa es un remedo, vacío, eso sí, del Universo de Antimateria de Qward. El enemigo Yon-Rogg pasa de ser rubio ario a ser moreno con una pinta sospechosamente similar a la de Sinestro, el malo de Green Lantern.
Pero vamos a por qué esta primera parte del Capitán Marvel serviría para una película.
Para empezar porque se puede simplificar. Porque los personaje acaban de comenzar. Porque el final es realmente una especie de final. Luego al personaje le cambian los poderes y el traje, y el entorno, se une a Rick Jones... es un superhéroe distinto del original.
Tenemos un doble triángulo amoroso. Entre Mar-Vell, Una y el Coronel Yon-Rogg, por un lado, y con Una, Mar-Vell y Carol Danvers, por otro. Esto es algo que al cine le gusta mucho.
La resolución del triángulo es asimismo muy interesante.
Aunque es una historia del género cósmico, lo cierto es que mantiene, en varios números, amenazas terrestres en una base militar. Osea, que el decorado es fácil y relativamente barato. No nos engañemos por las cifras del cine: intentan siempre gastar poco. Por eso sospecho que los trajes suelen ser negros y no de colorines, por más que nos hayan dicho que es para camuflarse en la noche o porque sería ridículo que fueran de lycra multicolor. Los superhéroes molan porque van en technicolor: porque no necesitan camuflarse para enfrentarse al mal.
Tiene el toque de "soy un enviado de los malos que quieren destruir la Tierra y el sistema de vida yanki pero en realidad yo soy bondadoso y voy a hacer el bien". Es algo que a las películas les gusta.
Aparecen personajes de esos que suelen aparecer en las películas y que no aclaran nada, que sirven como aglutinación de enseres visuales: Ronin el Acusador, La Inteligencia Suprema, Zot... que parece que van de mucha cosa pero cuyo contenido es mínimo.
Se le pueden poner un par de enfrentamientos contra elementos raros: Quasimodo, por ejemplo.
O se puede optar por el misterio del laboratorio del Doctor Lawson, identidad humana en la que se convierte Mar-Vell. Eso es bastante actual: se trata de esos misteriosos misterios misteriosos que pueblan las series de culto de la tele estadounidense actual. Mar-Vell ha tomado el aspecto físico de Lawson, "una invasión de ultacuerpos" o algo así, y siempre hay algún personaje como el del motel (que podría ser uno de esos cómicos que tendrían que hacer gracia) que vería indicios. de si Lawson es Mar-Vell o no. Por otro lado, está la cuestión de si el Doctor Lawson, humano, científico de prestigio y de confianza para los militares terrestres, es/era realmente de los buenos o si en realidad tenía una agenda oculta, mientras que Mar-Vell, extraterrestre kree, espía en una base militar terrestre, es realmente de los malos. Un pequeño rompecabezas que sirva de chicle para el cerebro.
Tiene unas cuantas escenas de tiros, un par de intentos de asesinato, otro de ejecución militar... Y, junto a ellos, tiene alguna frase como la del Capitán Marvel, número 11, cuando él dispara no importa contra qué (en las películas actuales no hay manera de enterarse qué pasa en una batalla). Se trata de una parrafada en la que se interroga sobre la violencia a la par que la intenta justificar: "¡Para unirme a otros seres en la construcción de un Universo mejor, antes debo sobrevivir! ¿O es éste el razonamiento que han empleado todos los luchadores desde el inicio de los tiempos para esconder la sangre de sus propios ojos?" [una gran frase en una de las páginas peor dibujadas de las Historia, por Dick Ayers). Así, pues, acaba con una frase poniendo en cuestión esa violencia, lo que me lleva al siguiente punto.
Esa frase es tremendamente actual, siendo de 1969. Es una frase post-Bush (no, tras los arbustos, sino tras el presidente imperial de los Estados Unidos). Es una frase aplicable a lo que parece que quiere ser, y no sabemos si será, la Era de Obama: no todo se puede resolver con violencia, y tiene que haber otros sistemas.
En ese momento, sucede el hecho luctuoso que marca la nueva vida del Capitán Marvel, y que acaba con un triángulo amoroso a la brava. Es decir, que es una especie de corolario de que la violencia sólo engendra violencia y tal.
Lo que sirve para que el Capitán Marvel, en un hecho que ya vimos desgraciadamente en la película Spiderman I, se dedique a la venganza contra Yonn-Rogg. Esto es algo que, com he dicho ya se usó en películas basadas en superhéroes, pero que aquí tiene su justificición en la historieta. Por otro lado, forma parte de un amplio consenso en los guiones: la venganza por la muerte de un ser querido.
Luego hay un par de escenas de esas de irse al espacio, a un asteroide a hacer cosas como poner tumbas y decir frases. Como en Watchm... ay, no, que no puedo hablar de esto.
En resumen, cortando y recortando (para que quepa en unas dos horas o menos), añadiendo pocos elementos, casi utilizando el mismo guión, y sin necesidad de forzar la historia ni unos personajes que apenas van con caretas que les tapen la cara, tenemos un tebeo considerado mediocre que se podría convertir en una película no mediocre sobre superhéroes. De hecho, es en si mismo una película a la altura de cualquier película de las realizadas hasta hoy en día. El presupuesto puede ser inmenso o mínimo, se pueden usar muchos o pocos efectos especiales, se puede escoger un supervillano o varios, o quedarse sólo con Yon-Rogg, porque todo eso y más cabe en estos 17-20 números iniciales del Capitán Marvel.
Lo malo, lo peor es, como dijeron de forma condescendiente en aquel programa de radio sobre cine: "es de aventuras, el género..."
5 comentarios:
Una entrada genial
Hey!!!! Me has pisado el post!!!! =PPPPPPPPPPP
Personalmente, me gusta màs lo que Thomas hizo despuès con el Capitan y los Avengers, en la Kree-Skrull War y aun más, lo que hizo Starlin...
SI EXISTE LA PELICULA ORIGINAL DE CAPTAIN MARVELEL PRIMER SUPERMAN ES UNA PENA QUE LA ESTEN OCULTANDO A LAS PERSONAS QUE TODAVIA AY LES GUSTARIA VOLVER A VIVIR ESOS MOMENTOS Y SERIA MUY EXELENTE QUE GODMAKERS PUDIERA RESCATARLA EN PELICULA LA ORIGINAL
Pues, la unica pelicula que conocemos del Captain Marvel eran los seriales de los años 40, muy similares a los de Batman y Flash Gordon. Aquí:
http://daniel-retrovisionblogspotcom.blogspot.com/2009/04/adventures-of-captain-marvel-1941-movie.html
Puedes encontrar los links para descargarlos...
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